Culpables de todo

Albóndigas

Parece que últimamente ante cualquier alerta alimentaria que se declara en Europa, todos miran a España. Desde los famosos pepinos alemanes, pasando por la carne de caballo y ahora desde Holanda acusan de que sus albóndigas están hechas de perros españoles. No sé si es casualidad o que existe una “mano negra”.

El país en el que vivimos se ha convertido desde hace casi dos años en el “culpable” de todos los problemas de alimentación que suceden en la Unión Europea. Es como si fuera el alumno al que el profesor le tiene manía y le culpa de todos sus males.

Lo más triste de todo es que siempre salta la noticia antes de que se confirme por las autoridades sanitarias, lo que ha afectado y está afectando al sector alimenticio. Ya en 2011, por la crisis de los pepinos, se perdieron 200 millones de euros a la semana, un coste que ni siquiera las indemnizaciones cubrieron. Existió un boicot a las verduras procedentes de nuestro país y luego se comprobó que el foco de E. coli no estaba aquí. A continuación, hace un par de meses, también se habló de que la carne de caballo de determinadas hamburguesas y albóndigas era española.

Chuletón

Ahora se suma la acusación realizada ayer por la prensa holandesa, y ¡qué casualidad! – Países Bajos, uno de los lugares de donde venía la carne de caballo- atribuye a España la procedencia de la carne de perro que se halla en sus albóndigas. Según un diario holandés, un mayorista de productos cárnicos de Ámsterdam habría estado importando cadáveres de perros desde España para usarlos en productos para la alimentación animal o incluso para albóndigas destinadas al consumo humano.

La Autoridad Holandesa de Seguridad en el Consumo, así como la española y la Guardia Civil, junto con la UE lo están investigando. Esperemos que se sepa pronto el origen de esa carne para que no ocurra como en la crisis de los pepinos, que haya pérdidas multimillonarias en un país sumido en la crisis. Y es que, nunca mejor dicho, “a perro flaco, todo son pulgas”.