martes, 9 de abril de 2013

Generación en tierra de nadie


Seguramente tú… Sí, tú que estás leyendo este artículo te vas a sentir un poco identificado o identificada. Estudiaste con el antiguo sistema educativo de la EGB. Jugaste con las muñecas o los master del universo hasta que tuviste los 12 años. Veías en la tele cada fin de semana los dibujos de 'Dartacan y los tres mosqueperros', a 'Willy Fog', a 'David el gnomo'.Tenías amigos con los que salías a jugar al fútbol o a las "casitas" en el patio o en la calle. Vestías como una niña o niño, “nada de hacerse mayor antes de tiempo” y te decían que si querías ser “alguien” el día de mañana, debías estudiar y sacar las mejores notas.

Personajes de la película 'Los Goonies' y juguetes de los 80
Fuente: Vanitatis

Sí, tú que perteneces a esa generación que tiene más de 30 y menos de 45 años. Aprobaste año por año el colegio, el instituto –y si repetías lo hiciste porque “te lo habías buscado” y sabías que aunque repitieras un año ibas a tener una recompensa. Te matriculaste en la universidad en lo que más te gustó, por lo que sentías vocación o quizás “para lo que te llegó la nota de selectividad”. Disfrutaste de tu época de universitario/a pero a la vez te reuniste con tus compañeros/as para realizar los trabajos e “hincaste codos durante cientos de horas” hasta que llegaste a la meta: ser diplomado/a o licenciado/a. Sí, estabas ahí, ¡¡ya lo habías conseguido!!

Luego hiciste prácticas en una o varias empresas y alguna te ofertó tu primer trabajo, puede ser que no muy bien remunerado pero, ¡estabas dentro del mercado laboral! Y como se solía decir de un empleo “se salta a otro”. Poco a poco fuiste ganando estabilidad, lograste un buen salario…¡¡todo parecía perfecto!! Hasta que en 2008/2009 llegó la crisis –a pesar de que algunos la intentaron negar y esconder- entonces empezaron a destruirse cientos y miles de puestos de trabajo (tanto de personal cualificado como poco cualificado). Se aprobaron numerosos Expedientes de Regulación de Empleo (ERE)y la sangría ha seguido hasta este 2013.

Alumnos en Campus de Guajara
Fuente: La Opinión de Tenerife


Así, probablemente tu situación ha cambiado mucho desde que terminaste la carrera, hace diez o quince años. Te cuesta más conseguir un empleo porque no perteneces ni al grupo de menores de 30 ni a mayores de 45, que son los que reciben más apoyos. No puedes aspirar a trabajos de “novato” y en vez de valorarse la experiencia se convierte en ocasiones en tu enemiga “porque diez o quince años trabajando” para muchas empresas significa que “te tienen que pagar más”.

En definitiva, tú aún eres una persona joven, en edad de trabajar y te sientes como si estuvieras en tierra de nadie, a mitad de camino. Sólo te queda mirar con optimismo el futuro: montar tu propio “chiringuito”, es decir, intentar emprender o “moverte más que los precios” para conseguir un empleo y tener suerte. Así que mucho ánimo porque quien la sigue la consigue. Y si muchas generaciones han salido adelante con menos formación y recursos, ¿por qué no va a hacerlo la nuestra si es la mejor preparada?

Oficina del SCE
Fuente: Universo Canario

2 comentarios:

Unknown dijo...

Tienes razón en lo que dices... pero de quién es la culpa de que ahora esté pasando esto?
De los políticos?... de los banqueros?... de los periodistas?... de la Iglesia Católica?... de los telepredicadores?... del cambio climático?... de Belén Esteban o del Sursum Corda?
Porque aquí todos tenemos la habilidad de echarle la culpa al "empedrado" como dicen mis amigos andaluces y de echar balones fuera... pero a mi me encanta la autocrítica (será porque pocas veces la veo en el mundo que me ha tocado vivir) y por eso pienso que la culpa la hemos tenido todos... nosotros, los que estamos en tierra de nadie también.
Nadie nos ha obligado a nada, como mucho nos han tendido una trampa y hemos caido como "toletes" (expresión muy canaria).... Nos hemos creído que todos éramos ricos... o nos gustaba vivir como ricos... Caímos en la trampa del capitalismo casi sin darnos cuenta... Perdimos los valores que durante tanto tiempo nos enseñaron... Miramos para otra parte... en definitiva, le vendimos el alma al diablo por dinero.
No busquemos culpables en otra parte, que seguramente los hay... primero mirémonos al espejo que más nos guste y reconozcamos los errores que hemos cometido... eso es lo único que puede ayudarnos a no tropezar de nuevo en la misma piedra.

MiriFdez dijo...

Creo que no haces bien en meter a todo el mundo en el mismo saco. Es cierto que, como dices tú, cuando éramos ricos, mucha gente vivió por encima de sus posibilidades. Pensaron que la época de bonanza iba a durar siempre, se pidieron créditos a destajo...pero también hubo personas que siguieron manteniendo sus valores. Algo parecido a la fábula de la hormiga y la cigarra. ¿Quė pasa ahora? Pues que los que fueron más hormiga están pasando mejor la crisis y algunos _no digo todos_ de los que vivieron por encima de sus posibilidades están pasando hasta hambre.

No obstante, si para algo nos va a servir esta crisis es para recuperar valores y apreciar lo que en realidad vale la pena: la salud, la familia, tener trabajo...