La música siempre ha sido tratada en este país como una “María”
hasta cuando se decidió introducir en los centros educativos como una
asignatura obligatoria hace veinte años, siguió siéndolo. Nunca se ha valorado
como debe la educación musical porque mucha gente lo ve como algo “ocioso” y de
entretenimiento, cuando en realidad es todo lo contrario.
Se ha comprobado que la música desarrolla la inteligencia de
los niños pequeños: agudiza el oído, le facilita el aprendizaje global y la
psicomotricidad.
Estudios científicos han demostrado que los pequeños que
aprenden música son más inteligentes. Esto se debe a que con ella no sólo
escuchan y aprenden a distinguir sonidos, sino que se inician en el aprendizaje
de las matemáticas, del sentido del ritmo y la articulación de las palabras.
Con esta materia sucede como con los idiomas, lo ideal es iniciarse en ella
desde temprana edad.
Sin embargo, en España y en concreto en Canarias, nunca se
ha visto así. Se le ha observado como algo “elitista” cuando se trata de un
aprendizaje universal. Un ejemplo lo tenemos en la joven tinerfeña Sislena
Caparroso de 15 años, ganadora del programa de Telecinco ‘Tú sí que vales’. Esa
niña no ha podido acudir a clases de canto para educar la magnífica voz que
tiene porque carece de dinero para pagarlas.
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Niña tocando el violín Fuente: cosasdetv.es |
Por ejemplo, hace 25 años al conservatorio podían acceder
aquellos que pasaban un periodo de prueba de quince días. Realizaban unos
cursillos gratuitos de verano –cuando estaba la sede en el Parque Viera y
Clavijo- y después tenías que hacer una serie de exámenes y te evaluaban si
tenías oído musical y sentido del ritmo. Si los pasabas ya entrabas en 1º de
solfeo. La matrícula anual tenía un coste similar a la de la Escuela de Idiomas actual.
Ahí iniciabas una carrera musical que en el 90 por ciento de los niños que
empezaban, se quedaba en el ciclo elemental (cuatro o cinco años de solfeo,
cuatro de instrumento y uno de coral). Eran pocos los que alcanzaban el grado
medio o superior y se dedicaban profesionalmente a la música.
Ahora el Conservatorio es mucho más selecto y clasista que
antes. Si quieren acceder a él para obtener un título oficial, deben demostrar
sus buenos conocimientos y pagar más. Por eso, mucha gente se decanta por las
escuelas de música, donde poder aprender de una manera más entretenida y más
económica.
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Sede del Conservatorio de Tenerife |
Es cierto que desconozco cómo está en la actualidad el tema
de las becas en estudios musicales, pero no entiendo cómo el conservatorio de
Tenerife y las escuelas de música dejan pasar “diamantes en bruto” como esta
chica. Si canta así, imagínense con una buena formación musical y en particular,
de canto.
Con este artículo sólo he querido reflexionar sobre la
situación de la educación musical que continúa siendo tratada como algo “elitista”
o de “entretenimiento”. La música bien enseñada aporta muchos beneficios a los
niños y a los adultos. Así que, por favor, como indiqué antes, “no se olviden
de ella y no la traten como una maría para entretener a los niños”.
2 comentarios:
la música debería ser materia prioritaria en cualquier sistema educativo, a todos los niveles!
Pues sí Raúl, pero siempre ha sido la olvidada. sin embargo, si valoraran todos los beneficios que tiene, se apostaría más por la educación musical desde las infancia. La música es formación y cultura. A ver cuándo se darán cuenta los responsables e instituciones.
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